All the disciples wanted to know that day was, when would the government be restored? That’s a top down question. But, Jesus understood the limitations of government and the paralyzing effect of obsessively looking to earthly institutions to achieve godly outcomes. Jesus offered a bottom up answer. A no spectator answer. A penetrating answer, “you be my witness!” Being a witness to Jesus Christ in no way is constrained by who occupies the White House. To be witnesses is not reserved for the monied or the mighty. You don’t need to be ordained to be a witness. To be a witness is the perfect adaptive approach to the most pernicious problems we face as a species. To be a witness is the radical democratization of leadership delivered through your personal and authentic experience of Jesus in your life.
Excerpt from Bishop Wright’s Sermon at The 118th Annual Council.
For People with Bishop Rob Wright
The podcast expands on Bishop’s For Faith devotional, drawing inspiration from the life of Jesus to answer 21st-century questions.
Testigos
Todo lo que los discípulos querían saber ese día era, ¿cuándo sería restaurado el gobierno? Esa es una pregunta de arriba hacia abajo. Pero Jesús entendió las limitaciones del gobierno y el efecto paralizante de mirar obsesivamente a las instituciones terrenales para lograr resultados divinos. Jesús ofreció una respuesta de abajo hacia arriba. Una respuesta sin espectador. Una respuesta penetrante: “¡Tú eres mi testigo! Ser testigo de Jesucristo de ninguna manera está limitado por quien ocupa la Casa Blanca. Ser un testigo no está reservado para el adinerado o el poderoso. No necesitas ser ministro para ser testigo. Ser testigo es la manera perfecta de ver los problemas que enfrentamos en nuestro diario vivir. Ser testigo es la manera democrática radical del liderazgo que se entrega a través de la experiencia personal y auténtica que tenemos de Jesús en nuestras vidas.
Un extracto del sermón del Obispo Wright en el 118th Concilio Anual.
