God’s word does not return empty or void, the book of Isaiah says. Once it’s out there, the world changes. God’s word was the creative force that brought the world and life into being. God’s word brought exiles home, the dead to life. God’s word changes everything. So when God says “there is no condemnation for those in Christ,” those words aren’t empty. They do their work in us to give life and peace and freedom. When we allow God’s words to take root in us, something happens! Our words have power to shape the world also. Are we speaking words of life? Are our words helping bring us closer the kingdom? Speak God’s words of life today to self and others. They don’t return empty.
Canon Sally Ulrey, Canon for Congregational Vitality & Ministry Development, The Diocese of Atlanta
For People with Bishop Rob Wright
The podcast expands on Bishop’s For Faith devotional, drawing inspiration from the life of Jesus to answer 21st-century questions.
Vacía
La palabra de Dios no vuelve vacía o nula, dice el libro de Isaías. Una vez fuera, el mundo cambia. La palabra de Dios fue la fuerza creadora que creó nuestro mundo y la vida en el. La palabra de Dios dio vida a los exiliados, a los muertos. La palabra de Dios lo cambia todo. Así que cuando Dios dice «no hay condenación para los que están en Cristo», esas palabras no son vacías. Ellas hacen su trabajo en nosotros para dar vida, paz y libertad. ¡Cuando permitimos que la palabra de Dios eche raíz en nuestros corazones, algo sucede! Nuestras palabras también tienen poder para moldear al mundo. ¿Estamos hablando palabras de vida? ¿Están nuestras palabras ayudando a acercar el reino? Hoy habla las palabras de Dios de la vida, a ti mismo y a los demás. No regresarán vacías.
